No es de extrañar que después de leer la prensa diaria a un@ le corra un angustioso estremecimiento por la médula espinal. Según 'El París', bandas rumanas de violentísimos asaltadores de hogares entran a miles por la frontera en atestados autocares. En la portada de 'El Facundo' podemos leer que Interior tiene indicios de una acción inminente por parte de islamistas suicidas. En la tecnoencuesta de 'La Retaguardia' ha ganado con un 98’2% de los votos el Sí, hoy me siento más inseguro, mientras que en la editorial nos alertan de la vergonzosa carencia de efectivos en el cuerpo policial autóctono.
El miedo ha sido históricamente una eficaz herramienta que los dominadores han utilizado para justificar toda clase de políticas represivas. En uno de los monográficos del Colectivo Escuela Libre se describen perfectamente los mecanismos del miedo inducido socialmente, sus consecuencias y sus objetivos.
“En primer lugar redescubramos o inventemos un tema. Cualquiera puede servir, siempre que contenga suficiente dosis de amenaza velada. Seguidamente amplificaremos el problema. De forma que el riesgo se torne más cercano y peligroso. Consigamos algunos buenos titulares de prensa, debates y tertulias de grandes expertos en televisión y radio. Y hemos conseguido que el tema preocupe. Ahora el buen ciudadano se sentirá seguro cuando su demanda de mayor control policial se vea satisfecha. Se habrá acabado con un problema que jamás existió. Eso sí. Pronto otro miedo pasará a ocupar su lugar.”
Con esto no estamos diciendo que en el mundo no exista la suficiente enajenación e hígado como para que alguien decida un día explotar en plena hora punta. O que no hayan quedado familias realmente maltrechas después de un atraco en sus propias casas. Pero - sin conocer las estadísticas - les podemos asegurar que el mal estado de las carreteras o la precariedad en el trabajo causan muchísimas más víctimas inocentes en España que etas, alcaedas y latinquins juntos. Y sin embargo estos asuntos no ocupan portadas. Ni siquiera se relacionan con ese concepto de la inseguridad ciudadana. Quizás porque lo que preocupa principalmente a l@s tecnócratas que nos gobiernan es el control social y no la solución de los problemas y peligros reales. Así el terrorismo y la delincuencia colman la prensa ordinaria para justificar por ejemplo la expansión del panoptismo o suculentas partidas presupuestarias a las Bandas Armadas del Estado, mientras que corregir los puntos negros de la red viaria, sustituir los quitamiedos asesinos o ilegalizar directamente los vehículos de más de tres ruedas representa una ‘inversión sin fondo’ para el Estado.
Era patético ver cómo, calcetines en mano, se empujaban y alzaban los codos para ser l@s primer@s en ofrecer su calcáneo al artefacto. El terror había calado.
Como pueden imaginarse, en un lugar donde el sedentarismo fotosintético es la actividad más ajetreada que se realiza durante las 24 horas del día, la maquinita no paró de vomitar osteopenias y osteoporosis a mansalva durante toda la mañana. Y lo mismo hizo por la tarde en el ayuntamiento del pueblo, donde acudían en masa l@s jubilad@s que habían sido previamente advertid@s de este servicio gratuito.
El proceso finalizaba con unas recomendaciones generales sobre lo importante del calcio en la dieta e invitando a tod@s l@s afectad@s a visitar al médico – ‘que conoce los productos que hay en el mercado y sabrá cual es el más apropiado para usted ‘.
En fin, una parafernalia marquetiniana bochornosa.
No hace falta ser muy hábil para descubrir quién está detrás de FHOEMO. Basta con entrar en su página web y clicar sobre “Socios Corporativos”. Bingo! Por citar algunos: Roche, Lilly, Sanofi-Aventis, Novartis, Danone, Puleva,... A través de su web también podemos acceder a las memorias de la fundación, donde narran impunemente su expansión del terror. Miles y miles de densitometrías realizadas por sus apóstoles de la osteoporosis en residencias, empresas, casales, asociaciones, sociedades, jornadas, campañas, etc. Tendiendo siempre, claro está, hacia la población de mayor riesgo. FHOEMO a la busca y captura de nuevos clientes para sus ‘socios corporativos’. Miguel Jara lo define como La fábrica de pacientes en un esclarecedor artículo donde revela cómo las multinacionales farmacéuticas se aseguran el negocio controlando y/o creando gran parte de las asociaciones de enfermos.
“Las grandes multinacionales farmacéuticas decidieron hace ya tiempo controlar el sistema sanitario desde su misma base, los pacientes, bien creando asociaciones de enfermos, bien controlando las ya creadas. La idea era aprovechar la sensibilidad social para prestigiar sus mensajes y sus tratamientos contando con la colaboración de personalidades que prestaran su imagen para tan “nobles” causas. La verdad es que se aprovechan de ellas para prestigiar tales asociaciones de enfermos cuyo fin no es en realidad otro que el de asegurarse de que sólo sus productos farmacológicos sean social y científicamente aceptados. Y es que, ¿qué mejor propaganda para sus productos que la de los pacientes a los que van destinados?”
- FHOEMO recibe un premio “a las ideas que hacen una farmacia mejor”. Otorgado por CORREO FARMACÉUTICO 2005.
Desde aquel día el consumo de yogures y sobrecitos de calcio en la residencia ha aumentado un 400%. Casualmente tanto los primeros como los segundos están fabricados por ‘socios corporativos’ de FHOEMO.
Para que ustedes no acaben de esta manera les recomendamos ejercicio físico y buenos alimentos, que acostumbran a ser la mejor arma contra osteoporosis y todo tipo de dolencias,...
...y alguna información relacionada:
- Calcio y osteoporosis. Mitos y verdades.
- Higienismo y osteoporosis en Zuhaizpe.com
- Osteoporosis provocada por medicamentos.